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marzo 2009

Asociación Argentina de Microbiología

El 28 de noviembre pasado se celebró el 60º aniversario de la fundación de la Asociación Argentina de Microbiología. En dicha ocasión fue invitado a la tribuna el Prof. Dr. Héctor G. Aramburu.

ALGUNOS RECUERDOS DE UN SOCIO FUNDADOR

Dr. Héctor G. Aramburu*


Permiso Sr. Presidente.

Antes de distraerlos con estas pocas palabras que, por otra parte serán conocidas por muchos de Uds. deseo decirles cuán honrado y agradecido estoy al haber sido invitado a ocupar esta prestigiosa tribuna. Una cosa que ciertamente me ha dado confianza y animado a hacerlo es la seguridad, que aquí veo concretada, de hallar una buena serie de caras amigas todos consocios de esta ya madura Institución.

Mis recuerdos arrancan, no se alarmen, de alrededor de 1946 cuando un grupo de profesionales, médicos unos, veterinarios otros, químicos farmacéuticos e ingenieros agrónomos otros todos militantes de las ciencias y artes microbiológicas, decidieron organizarse en una entidad que los contuviera orgánicamente. Muchos de ellos no están ya hoy con nosotros como por ejemplo Bachman, Parodi, Monteverde, Vilches, Pennimpede, Negroni, Manzullo, Fleitas, Verna, y muchos otros que no recuerdo pero tengo presente en el recuerdo global.

La fundación data, por supuesto y como bien se sabe del 3 de agosto de 1948 pero quizás debería decirse que la gestación fue un tanto elefantina pues la chispa inicial saltó en el 46 y hasta el verdadero nacimiento conversaciones, conversaciones y conversaciones… Las reuniones, no todas suaves, se desarrollaban en distintas Cátedras de Microbiología quizás preferentemente en Microbiología de Medicina, también en amable casa de Bachman.

En cuanto a mi mismo perdónenme este escape del ego, fui en la Asociación Secretario en la Presidencia «o con o de Negroni», todo un caballero y un conocedor cabal de su tema y que como me tenía cerca me hacía sentir secretario lo que me sirvió de mucho en diversas tareas. Mi campo de actividades fue la enseñanza superior y mi interés no se apartó nunca de la Fiebre aftosa. Traje de mi formación en Inglaterra los comienzos de la serología del virus aftoso y los primeros estudios cuantitativos del mismo ya que hasta 1946 los conocimientos eran puramente cualitativos. Sin embargo la Fiebre aftosa sigue siendo una calamidad pese a los grandes esfuerzos realizados en todo el mundo y la Argentina no es de los menores contribuyentes.

El lugar que ocupa hoy la Asociación y el largo camino recorrido, sus acreditadas publicaciones y su edificio propio hablan a las claras de la actividad de tanto las Comisiones Directivas como de Socios que han ofrecido su valioso tiempo con el resultado que está a la vista.

Como toque final les diré que mi atracción por la microbiología y por el virus Fiebre aftosa ha llegado al hecho de que mi esposa y colega y socia vitalicia Martina Segura y cultora de igual especialidad, ha sido mi constante asesora, consultora, directora y mucho más.

A todos ellos y a la Comisión Directiva actual bajo la hábil dirección del Presidente Santojanni, extiendo mis mejores felicitaciones y buenos deseos de exitosa continuidad y por supuesto agradezco la más que amable invitación y permiso al usar tan prestigiosa tribuna lo que me enorgullece.

Muchas gracias nuevamente.

Héctor G. Aramburu

* Vicepresidente Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria